Desde su domesticación, el perro ha desarrollado una estrecha relación con el ser humano evolucionando con el tiempo. Sin embargo, desde siempre se ha conocido la facilidad que tiene para generar apego con los seres humanos.
En esta ocasión abordaremos una de las causas más frecuentes de consulta en adiestramiento canino: la ansiedad por separación.
Debemos entender que la vida del perro doméstico tiene dos etapas en su socialización, en la primera que abarca las primeras ocho a diez semanas de vida el perro convive con los cachorros de su camada y permanece al cuidado de su madre, y en la segunda está bajo el cuidado del ser humano. Sobrellevar de una forma inadecuada estas etapas puede generar en los canes conductas de temor y ansiedad que interfieren en su relación con las personas, otros perros y su ambiente.
Se han realizado varios estudios científicos en los que existe evidencia de que los perros forman lazos de apego estables con sus cuidadores, similares a los descritos en las madres humanas y sus hijos. Sin embargo, existen casos en que ese apego se intensifica, y se pueden generar problemas de conducta relacionados con la ausencia del cuidador o tutor, lo que se conoce como ansiedad por separación.
Dentro de las causas implicadas en este problema se encuentran factores relacionados con el tutor, el ambiente y el perro. Se ha observado que tienen mayor riesgo de padecerlo aquellos perros que han sido humanizados, es decir que son tratados en forma similar a un bebé humano. Otros factores que influyen son las mudanzas, la llegada de un nuevo miembro a la familia, cambios en la rutina de trabajo del tutor, adopción inmediata a los 2-3 meses de vida, perritos adoptados en refugios y dejar al cachorro solo por tiempo prolongado.
Esta conducta errática la manifiestan cuando se quedan solos, y no se relaciona con la desobediencia o el aburrimiento, sino con la frustración relacionada con quedarse solo. Las conductas referidas comúnmente cuando el perro sufre de ansiedad por separación son:
• Vocalizaciones excesivas, como ladridos y aullidos.
• Masticación excesiva u otro comportamiento destructivo.
• Orinar o defecar dentro de la casa, sin estar relacionado con el entrenamiento de control de esfínteres en los cachorros.
• Cambios en el apetito.
• Salivación excesiva, respiración rápida y estado constante de alerta.
• En casos más severos, puede observarse acicalamiento excesivo que puede ocasionar lesiones y otras conductas obsesivo-compulsivas (perseguir la cola, caminar en círculos, perseguir objetos inexistentes, etc.).
Además de representar un problema en la relación del tutor con el perro, para este último el no tratar la ansiedad por separación puede traer consecuencias en su salud, ya que permanece en un estado constante de estrés, poniendo en riesgo su sistema cardiovascular (presión arterial, condiciones de su corazón), su regulación hormonal y su sistema inmunológico, lo que le predispone a tener infecciones recurrentes.
El abordaje de este padecimiento siempre debe ser en conjunto con el médico veterinario, quien dará tratamiento a sus problemas físicos, y un experto en conducta canina, ya sea un etólogo, un adiestrador canino o ambos. Algunas modificaciones en tu rutina que podemos recomendar para evitar que tu perrito se estrese cuando no estás, son las siguientes:
• Establece rutinas de paseo.
• Promueve la socialización de tu perrito, de acuerdo con la recomendación de tu adiestrador o etólogo de confianza, ya que este proceso debe individualizarse.
• Evita que al salir de casa tus despedidas sean largas, ya que tu perro puede detectar tu estrés al salir, asociándolo a una experiencia desagradable.
• Programa con tu perro un tiempo de juego antes de salir de casa, especialmente en salidas mayores a seis horas, y permanece a su lado al terminar el juego mientras se relaja.
• Realiza actividades estimulantes para tu perro, es decir, que impliquen un desafío, como los juegos de olfato, comederos tipo rompecabezas, etc., que te puede recomendar un experto de acuerdo con la condición de tu perrito

MUNDO CANINO
En casos más severos, tu médico veterinario puede dar medicación bajo estricta supervisión. Recuerda que el abordaje es en conjunto, y si tienes alguna duda sobre cómo ayudar a tu perrito a socializar, cómo guiar juegos de olfato y búsqueda, conocer algunos juguetes que te puedan ayudar con sus impulsos, si quieres saber más sobre este problema de conducta o quieres que abordemos algún otro tema, contáctanos a través de nuestras redes sociales. Estamos para ayudarte a ti y a tu fiel amigo.