La actitud, alimentar la espiritualidad, los deseos de vivir y hacer lo que nos gusta son los principales motivos para lograr los propósitos.
Las satisfacciones y resultados de esfuerzo que se hagan se verán reflejados no sólo al inicio del año sino que tomarán el control de nuestra vida.
La Navidad y el fin de año son fechas de felicidad para la mayoría de las personas, pero para otras son motivo de nostalgia, depresión y sentimientos negativos.
Sin duda, el clima influye en la aparición de síntomas depresivos, lo que se conoce como “Alteración afectiva estacional”.
“El tiempo afecta las emociones, utilizamos la palabra ‘gris’ para señalar un estado de ánimo que coincide con los días nublados”, señaló la psicóloga Maribel Altamirano.
La crisis económica, por otro lado, aumenta las preocupaciones y el estrés, así como el deseo de compartir en esta época con alguien que ya falleció, le da un “sin sentido” a la vida. No llevar a cabo los propósitos, además, causa frustración y culpa.
¿Cómo evitar los sentimientos negativos y cumplir con las metas del año nuevo?
Maribel Altamirano respondió que se debe dar prioridad a lo que se considere más importante y concentrarse en
lograrlo.
Plantearse pequeñas metas cada día hace la diferencia, pero para lograrlas, apuntó, es necesario planificarlas y
esforzarse.
METAS A LARGO PLAZO
Bajar de peso, dejar de fumar, ser pacientes y tolerantes son algunos de los propósitos que cada año se escriben en la lista de propósitos.
Pero, ¿cómo llevarlos a cabo y mantenerse firmes a lo largo del año?
“La motivación diaria es lo que le permite a una persona ser mejor, y ese carril de la mejora continua es lo que ayuda a lograr las más anheladas metas para llevar una vida satisfactoria”, manifestó.
EL EXITO
Cuando se establecen metas propias, éstas motivan a las personas a seguir adelante para lograrlas y tener éxito.
La motivación diaria es muy importante, para conseguirla hay que seguir estos cuatro pasos:
1. La actitud. Ser positivos es una fuente de motivación diaria. Estar convencidos de que nuestra meta es muy difícil de lograr, con el tiempo te impedirá llevarla adelante. Una actitud negativa causa estrés interno y externo llevando al fracaso.
Para lograr las metas debemos ser capaces de creer que las podemos sacar adelante. Si tú te dices que puedes hacerlo, lo más probable es que así suceda. Nunca subestimes el poder de tu mente, pues tiene que ver con la actitud y la perspectiva.
El ardiente deseo de lograr un objetivo es lo que hace que se vaya tras él, incluso en los días malos.
2. Creer en un ser superior. La espiritualidad ayuda a mejorar la motivación diaria. El universo, la divinidad, la vida, Dios, pueden ayudar como herramientas de motivación.
Gracias a esas creencias se fortalecen las personas mentalmente. La meditación u oración diaria permiten tomar conciencia y limpiar la mente para empezar el día como una hoja en blanco.
3. Deseo de vivir. La motivación diaria se fortalece con el simple deseo de vivir, vivir por algo o alguien. Por ejemplo: trabajar para ayudar a tus padres eso te inspirará a salir de la cama por la mañana.
4. Hacer lo que nos gusta. Las personas que se desarrollan en ambientes de calidez tienen una actitud más positiva ante la vida. Tienden a hacer lo que realmente les gusta. Lo que dé una sensación de paz interior y de sentimientos positivos, serán parte de la motivación diaria.
clase_editor@horacero.com.mx
Tels. 929.75.85 al 87. Ext. 106