Ellos salieron de Reynosa días después de la inauguración de la Copa Mundial Brasil 2014 con la camiseta bien puesta y la garganta afinada, dispuestos a echarle porras a los jugadores del Tri quienes los motivaron a tomar el avión invitándolos a estar en la tribuna.
Durante varios días tuvieron la oportunidad de compartir su estancia con los turistas quienes estuvieron por allá defendiendo también el escudo
de su escuadra.
César tuvo la suerte de tener boletos para presenciar el partido de México contra Camerún, un encuentro que disfrutó al máximo, porque la Selección de su país resultó ganadora.
Además tuvieron la oportunidad de conocer algunos lugares cercanos a los estadios donde presenciaron los juegos y, por supuesto, fueron a Alto de Boa Vista, en Río de Janeiro, donde se tomaron una foto portando la bandera tricolor, a los pies del Cristo de Corcovado o Redentor, además de disfrutar de la playa.
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