Una mascota además de una compañía es una responsabilidad. Tener una en casa provee beneficios relacionados con la salud y las emociones.
POR JOSÉ LUIS MONTEMAYOR / ALEJANDRA ARELLANO / VIRIDIANA LEAL
Los animales de casa pueden contribuir a mejorar la salud física y emocional de sus dueños, en casos de estrés, angustia y depresión.
De acuerdo a estudios, las personas que tienen una mascota y el contacto con la naturaleza genera una mayor producción de neurotransmisores que dan una sensación de relajación, placer y bienestar.
Las emociones impactan de manera decisiva en los tratamientos médicos para las enfermedades, pero de ninguna manera los sustituye, sólo contribuyen a mejorar el estado anímico y, por ende, a que sea más eficaz.
Con el tiempo cada vez es mayor el empleo de animales para terapias físicas, de rehabilitación y psicoterapias.
Los ancianos son un claro ejemplo de los beneficios de tener una mascota, quienes de cierta manera se sienten acompañados y motivados a levantarse de la cama para atenderla y salir a pasear con ella.
A los niños y los adolescentes los motivan a ser más responsables y establecer lazos sociales.
Sin embargo, es necesario elegir una mascota en consenso y establecer reglas para cada uno de los integrantes, distribuyéndose las tareas y su cuidado.
Los perros y los gatos, principalmente, son los que se han robado más el corazón de las personas y se les considera como parte de la familia, pero hay una línea muy delgada que no debe trastocarse en cuanto a querer sustituir a algún integrante por el animal.
LOS PERRHIJOS
Cuando no hay hijos, hay quienes cuidan a sus mascotas como si fueran personas. Se les llama “perrhijos”, un término que en la actualidad es muy común.
Alejandra Zertuche Rodríguez, psicóloga, opinó que es común trabajar con animales para controlar el estrés de personas, como es el caso de la equinoterapia, nadar con delfines o tener un perro en la casa.
Mencionó que la terapia con canes se usa para aliviar aspectos emocionales de sus dueños al crear un vinculo de protección, incluso se utilizan en las prisiones para que los reos descubran nuevos sentimientos de no lastimar a otros, o tener la responsabilidad de hacerse cargo de alguien.
A una persona ansiosa y con pensamientos negativos se le sugiere una terapia para mantenerla ocupada. Se le recomienda tener una mascota, de preferencia que sean cachorros.
“De esta manera son responsables de la alimentación del perrito, de su salud, de bañarlos y recoger sus desperdicios”, expresó
La especialista agregó que cuando una pareja no puede tener bebés, adopta una mascota y la vincula como si fuera un hijo, pero cuando la madre se embaraza el proceso es cruel para la mascota, al sentirse reemplazada o abandonada.
Ella se considera una “animal lover” por lo que pidió cuidarlos con responsabilidad y afecto, pero nunca considerarlos como “perrhijos”.
Abundó que no es correcto llegar a este extremo; suplir el cariño de las personas por los animales.
Incluso hay quienes discuten por llevarlos en el área de pasajeros en un avión, cuando lo permitido es meterlos en una jaula y registrarlos en el área de documentación.
“Vi a una persona casi desmayándose porque su perrito no podía ir con ella en sus piernas, ¿hasta donde el apego? ¿qué carencias está cubriendo con el animal? Son valiosos, pero no a tal grado”, consideró.
Para los infantes con problemas conductuales tener una mascota es benéfico porque trabajan su sentido de responsabilidad al alimentarlos, darles un baño y hasta recoger sus desperdicios.
“Entonces se crea una conciencia para que cumplan ciertas tareas específicas”, dijo.
¿ADOPTAR O COMPRAR?
La directora de Espacio de Genios consideró que es mejor adoptarlos porque hay miles sin hogar. Tener una mascota en casa representa responsabilidad, pero la recompensa es que son muy agradecidos.
Como ejemplo citó a “El Güero”, un perro callejero adoptado por una tía. Le brindaron un hogar y fue muy querido por todos.
En la actualidad hay un problema de consumismo en las nuevas generaciones. No es normal que a los animales se les quiera vestir con ropa de marca y hasta joyas. Son mascotas para cuidarse, que están para dar y recibir amor.
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