La Monumental Plaza de Toros Reynosa dio la despedida al legendario rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza, quien se presentó en la tarde del 3 de noviembre como parte de su gira final en México.
Desde las 16:30 horas el público aficionado a la tauromaquia ocupó las gradas para ser testigo de un espectáculo que brilló en cada faena.
La tarde arrancó con el rejoneo de Hermoso de Mendoza, el que demostró por qué su nombre es sinónimo de maestría en el ruedo. En dos entradas impecables, logró cuatro orejas, dos en cada faena, consolidando su legado ante el público reynosense.
Los toros de las ganaderías Boquilla del Carmen y Puerta Grande brindaron el escenario ideal para los toreros de la jornada.
Juan Pablo Sánchez abrió su participación con una destacada estocada que le otorgó una oreja. En su segunda salida la destreza de Sánchez le hizo acreedor de dos orejas adicionales.
El novillero Kevin Loyo, a pesar de no haber recibido orejas en su primera aparición, regresó al ruedo con determinación y obtuvo dos orejas en su segunda oportunidad, dejando una buena impresión entre los asistentes.
La tarde concluyó con aplausos y emoción, lo que marcó un cierre memorable y una despedida inolvidable para Hermoso de Mendoza.