Aprovechando las vacaciones, Lucía Robles y su mamá, América Rangel, viajaron rumbo al continente europeo hasta llegar a Bélgica, donde han visitado los principales lugares, sin faltar, por supuesto, la ciudad capital, Bruselas y su Gran Plaza, rodeada de antiguos edificios y en la que destaca el Ayuntamiento, el único testigo de la arquitectura medieval construido entre 1402 y 1455.
Durante cinco días se olvidaron de Reynosa y se dedicaron a pasear por las calles y avenidas disfrutando de sus atractivos turísticos. Entre éstos, Brujas, una ciudad que sobresale por sus puentes, muelles y atracaderos.
También estuvieron en Antwerp, uno de los puertos considerado entre los más grandes en el mundo, sobre el río Scheldt. Las fotos en el Atomium no pudieron faltar, una estructura de 102 metros de altura construida para la Exposición General de primera categoría en Bruselas, del año 1958.
El Atomium es para Bruselas lo que la Torre Eiffel para París, un monumento que marcó época y se ha convertido en el símbolo de la ciudad.
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