La mujer moderna en el desarrollo de la sociedad

Las mujeres a través de los años han sido pilares fundamentales del núcleo familiar: su misión se reducía a la educación y formación de los hijos, mientras el padre cumplía la función de proveedor.
Aun cuando su papel se limitaba a los quehaceres del hogar, muchas de ellas tomaron la iniciativa de realizar trabajos fuera de casa en búsqueda de su crecimiento profesional, aunque no les fue fácil.
UN DÍA PARA RECORDAR
Tras décadas de desigualdad e injusticias, en 1848 se da la primera Convención Feminista sobre los Derechos de la Mujer. Reunidas aprueban el 8 de marzo para conmemorar el Día Internacional de la Mujer en reconocimiento a las trabajadoras que murieron en el movimiento obrero de la fábrica Textilera Cotton, ocurrida 53 años antes.
Desde entonces los cambios y avances logrados les han permitido ocupar cargos importantes fuera del hogar, sin olvidarse que su rol de mamá es su prioridad.
En la actualidad, no solo ocupan puestos relevantes y antes considerados propios de los hombres. Se desempeñan como ingenieras, arquitectas, comentaristas de deportes, asesoras financieras, y hasta se han atrevido a llegar a la luna. Muchas de ellas incluso son empresarias, gerentes y directoras.
En las universidades los y las estudiantes están en igualdad de circunstancias, no hay motivo para que ellas queden fuera de las aulas como es el caso de Dulce Adriana Mayorga Cantú, quien es egresada de la Universidad México Americana del Norte como licenciada en Derecho, carrera profesional que eligió por el deseo de ser un medio de cambio para crear una sociedad mas justa.
Independientemente de ser mujeres que han sobresalido en algún campo laboral, ellas cuidan su imagen y su forma de verse ante los demás, el traje ya no es propio de los hombres.
MAMÁ Y PROFESIONISTA

Dulce nació en Reynosa, es hija de Gustavo Mayorga Leal y la licenciada Rosalinda Cantú González. Madre de Miranda Isabella, de 14 años de edad y Alonzo Maximiliano, de 12.
Su vida personal la comparte con su carrera, pero como madre “no hay nada mas importante que ellos (sus hijos). Todo lo que hago es por ellos, y pido a Dios que me dé vida y salud para estar siempre a su lado, así como mis papás, están siempre para mí”, expresó.
Compaginar el rol de madre, ama de casa y profesionista reconoce que ha sido muy difícil, “pero mamá siempre puede, así que no hay más que sacar fuerzas del más allá. Levantarte con un gracias Dios por mi despertar, y considerar que el día de hoy será mejor que el de ayer”.
Dulce habla inglés y español y trabaja en el Consulado de México en McAllen, Texas, en el área de Documentación. Además de desempeñar funciones administrativas y de trámites, está en atención al público.
Anteriormente, trabajó en el Instituto México en Texas (IMAT) y en Inter National Bank.
ENTREGADA AL CIEN
Su día lo distribuye en todas las actividades tanto de sus hijos como las de ella. Es una mujer que se considera fuerte, trabajadora y amable; sincera, servicial y alegre, y a la que le gusta cantar y bailar. En el campo profesional es entregada y responsable al cien por ciento.
Su madre es la mujer a la que más admira por ser un gran ejemplo de superación, adicta al trabajo y dispuesta siempre a ayudar al que lo necesita sin importar la persona que sea.
Para Dulce los principales obstáculos que enfrentan las mujeres en la actualidad son la discriminación oculta en la disparidad de ingresos entre hombres y mujeres. Pero considera que los mayores logros obtenidos son el acceso a la información y las reformas legales que establecen las mismas oportunidades laborales que los hombres.
INTEGRACIÓN LABORAL
Dulce Mayorga considera que el empoderamiento femenino en las últimas décadas se debe al aumento de la participación de las mujeres en los procesos de toma de decisiones e integración laboral, como es su caso.
Para ella la contribución femenina es relevante en el desarrollo socioeconómico de la comunidad, además de ser la columna vertebral de la sociedad sin dejar de cumplir el rol de madres.
Considera que las mujeres han ganado espacios antes limitados a los hombres, al demostrar que de manera intelectual son tan capaces como ellos, incluso, sus capacidades y habilidades son complementadas con una de las virtudes intrínsecas de su ser: la sensibilidad.
Asegura que con el tiempo las expectativas de las mujeres cada vez son mayores y sus metas cada vez más altas, por ende, se le valora por todas esas cualidades, y no solo por lo que representa en el desarrollo familiar.