Ante un vasto público al que hizo reír y llevó a la reflexión con sus comentarios, anécdotas e historias, Lozano en esta ocasión habló de la forma como se puede agregar inteligencia a la emoción.
Señaló que en base a cinco puntos fundamentales se puede cumplir con este propósito.
El primero, dijo, es conocer las propias emociones, identificarlas y reconocer de qué forma se expresan, es decir, como se reacciona ante situaciones de alegría, enojo, tristeza, frustración y miedo.
Indicó que el segundo paso es aprender a manejar las emociones, de esta manera se puede reconocer que se tiene un carácter difícil y qué es lo que lo motiva.
“De nada sirve engañarse a sí mismo con falsas percepciones acerca de la personalidad. Lo mejor es no llorar ni sufrir por personas que no nos valoran”, comentó.
Como tercer punto, manifestó la importancia de la motivación propia, ya sea material o espiritual.
Refirió Lozano, en el cuarto punto, que también es necesario reconocer las emociones de los demás.
“Es importante determinar el momento indicado para dar a conocer noticias sorpresivas a los demás. Esto es, evitar proporcionar información incómoda cuando alguien está enojado, ya que el mensaje no será recibido y se reaccionará en forma violenta”, aseguró.
Por último, en el quinto punto, consideró necesario aprender a manejar las emociones y evitar que éstas dominen a las personas.
Reconoció que en ciertas situaciones a veces es difícil evitar la ira, la tristeza o los arrebatos, por lo que antes de hablar hay que pensarlo dos veces.
Para controlar las reacciones negativas César Lozano sugirió identificar la causa, respirar profundamente, enfrentarla con
