¿Te ha pasado que el hacer algunas actividades en la escuela o del trabajo son simples para ti, a diferencia de a tus compañeros o amigos que se les dificulta mucho? Bueno, eso es por los instintos e impulsos que se han desarrollado en el crecimiento y formación. Si te preguntas cómo sacarle provecho para la formación de tu perro, te cuento rápido, ya que es más simple de lo que te imaginas.
Durante nuestro desarrollo dentro del vientre, es decir, en la gestación, la madre nos trasfiere cierta información mínima necesaria para que cuando salgamos al mundo, no morir o resultar insuficientes para conservar la especie. A esta información se le conoce como instintos, la cual viene grabada en el ADN. Esta información se ha estado sobrescribiendo a través de las generaciones, ya que el medio ambiente, la alimentación, la fauna y todo lo que nos rodea influyen directamente en la sobrevivencia. Así que los padres juegan un papel muy importante en este punto.
Una vez que ya salimos al mundo y estamos creciendo y fortaleciéndonos, gracias a lo que los padres proveen, empezamos a luchar para sobrevivir, y aquí nos topamos con algo que no a todos les agrada, que es la selección natural. A mi parecer no es mala ni buena, solo se asegura de que sobrevivan los más aptos.
Al pasar algunos días, empezamos a crear conexiones neuronales en el cerebro, lo cual genera cierto comportamiento en el individuo. A esto se le conoce como información ambiental. Y empieza la lucha por la sobrevivencia, ya que nos obliga a movernos para resguardarnos del clima, protegiéndonos del frio, la humedad, y todo lo que nos incomoda.
En la siguiente etapa empieza la interacción social, donde se compite por alimentos, recursos y refuerzos. Ya que, por evolución, al estar en un grupo, se aumentan las posibilidades de sobrevivir. En estos momentos el sujeto empieza a utilizar lo aprendido individualmente y los empezar a mezclar con lo que hacen los demás, a esto se le conoce como información por imitación. Perro ve, perro hace, esto desarrollara su temperamento.
Durante su desarrollo existen muchas más pruebas y obstáculos, los cuales obligan a fortalecer algunos y a disminuir otros comportamientos, estos se conocen como impulsos, los cuales se han adquirido en las etapas anteriores, ya que se están adaptando al entorno que lo rodea y se perfeccionan las habilidades obtenidas durante su permanencia en el grupo. En estos momentos el perro ya gestiona su auto conservación.
En esta etapa es la más recomendable para iniciar con los adiestramientos, para la formación de un perro que tendrá una función en particular. Ya que, a través de su aprendizaje previo y sus rasgos de carácter, serán seleccionados para las actividades que son más habilidosos.
En conclusión, la diferencia de los instintos, impulsos y rasgos de carácter son esa información heredada, aprendida y cómo gestionamos todo, para prepararnos a los obstáculos que se presentaran al momento de nacer, crecer, reproducirnos y educar a los que nos preceden.
A continuación te daré una lista de algunos impulsos observados en los perros, que te ayudaran:
Caza: las ganas de perseguir, olfatear: la acción de detectar aromas, matar: acción se sacudir a la presa, recobrar: regresar con su premio o presa. Estas son las acciones que desarrollamos si queremos que nuestro perro logre estar tranquilo en casa.
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