
La dieta de las mascotas es un elemento fundamental en el cuidado de su salud, ya que depende de ésta todos los procesos metabólicos de su organismo y pueda realizar funciones como: ladrar, correr, jugar, saltar y, en general, desempeñarse de manera correcta.
Una alimentación basada en productos comerciales, tales como las croquetas, garantiza un mínino de requerimientos nutricionales, pero como en todo, hay sus excepciones.
En el caso de una dieta “casera” tampoco ofrece los nutrientes mínimos necesarios debido a que son generalmente altas en proteínas y carbohidratos: pollo, jamón, salchichas, arroz, galletas… Esto implica que la limpieza de la boca debe realizarse una o dos veces por semana con pasta y cepillo dental especial, para evitar que se generen problemas de sarro, gingivitis y mal aliento, así como obesidad, hígado graso, artritis, hipertensión y enfermedades cardiacas.
DIETA BAFAR
La nueva tendencia para alimentar a las mascotas consiste en la dieta Bafar (alimentos crudos biológicamente apropiados, por sus siglas en inglés ). Se basa en alimentos crudos que incluyen carne de res, pollo o ternera; algunas verduras y frutas. El punto importante es que los alimentos deben cumplir con ciertos requerimientos especiales. Un ejemplo es que la carne debe proceder de animales criados orgánicamente, es decir, sin hormonas ni antibióticos, mientras que las verduras y frutas deben ser orgánicas, es decir, cultivadas sin pesticidas.
Al igual podemos encontrar productos altamente tóxicos como el chocolate (por la teobromina, una sustancia que no pueden metabolizar), las cebollas, los aguacates, las uvas, los ajos, las nueces y las almendras.
En conclusión, no existe la dieta perfecta por lo que ninguna de las dietas antes mencionadas es la mejor. Lo ideal es preguntarse qué le puedo dar y qué le puede hacer daño a nuestra mascota.
Lo recomendable es organizar su dieta en tres aspectos importantes: salud, presupuesto y tiempo.