Sus padres, Bárbara Cantú de Maldonado y Alfonso Maldonado así como Judith Plata de Cantú y Manuel Cantú, respectivamente, eligieron como padrinos de los niños a Alfonso Maldonado, Bárbara Cantú de Maldonado y Miriam Plata además de Judith Plata de Cantú, Manuel Cantú y Karla Maldonado.
Jorge Eduardo lució el ropón que usó su mamá cuando fue bautizada, mientras que Iker Alfonso vistió uno confeccionado con telas bordadas y encajes españoles.
Después de celebrada la misa se ofreció una recepción en el centro social “La Cucaracha”, donde los invitados plasmaron su huella digital con tinta verde sobre una pintura con el “Arbol de la vida”, simulando las hojas que llenarían de follaje a los troncos secos.
La imagen sustituyó el tradicional álbum de firmas.
