El viernes 18 de octubre la residencia de la familia Durán-Ramírez recibió a familiares, amigas “del alma” y nuevas amistades, así como religiosas del Colón y la Casa Amparo; todas ellas para celebrar a María Aurora Ramírez de Durán, quien el 22 del mismo mes cumplió años.
Agradecida con Dios por esta “celebración de vida” y con todas las que la acompañaron en este día tan especial, María Aurora, su esposo Eucario y su hijo Cayin les dieron la bienvenida a las invitadas.
Una variedad de bebidas y botanas, y una rica taquiza, además de no faltar el pastel, cortesía de su comadre Adriana Jiménez, le dieron el sabor a la reunión en donde las risas, los recuerdos y la diversión estuvieron presentes durante todo el festejo.
Fue una celebración inolvidable en la que la música de mariachi con acordeón, regalo de sus primas Garza, y hasta de saxofón, obsequio de sus ex compañeras de trabajo, amenizaron la fiesta. Una sorpresa que a la festejada la llenó de emoción.
Las felicitaciones en las redes sociales se hicieron extensivas, incluso se subió una foto de 1974 con amigas del Instituto Colón para compartir uno de los tantos momentos que guardan en su memoria.
Fue un día como ella lo describe: inolvidable, lleno de amor y alegría en la que todas y cada una de las personas que estuvieron presentes las llevará siempre en su corazón.