• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
  • Saltar al pie de página

Edición Impresa

Top

Top

La Revista

  • Sociales
  • Eventos
  • Entrevista
  • Reportaje
  • Espectáculos
  • Columnas
  • Edición Impresa

Una pata amiga

24 de septiembre de 2025 por Redacción

Tomando en cuenta que vivimos en un contexto social en el que las difíciles circunstancias de la vida de muchas personas en nuestro país, los llevan a tomar la fatídica decisión de terminar con la vida, es importante que continuemos con la labor de crear consciencia en la población acerca de esta situación. El 10 de septiembre se conmemora el día Mundial de la Prevención del Suicidio, acción que también se lleva a cabo durante todo el mes de septiembre. Pero dirán y ¿eso qué tiene que ver con perros?
En ocasiones anteriores hemos platicado de los beneficios para el ser humano al saber que contamos con un compañero incondicional que nos demuestre afecto e interés. Esos amigos peludos a quienes podemos platicar nuestras ideas, pensamientos o problemas sin sentir que nos están juzgando, son los perros. ¿Quién no ha tenido un perro como compañero? Ya sea en casa, en el trabajo, o ese perrito de la calle que nos acompaña hasta la tienda, el trabajo o el hogar, ese perrito al que le compartimos un poco de comida mientras nos ve. Hemos escuchado muchas veces acerca de los perros de apoyo emocional, en redes sociales, estaciones de autobús, aeropuertos, estancias, etc. Pero un perro de apoyo emocional implica más que un título para poder ingresar a la cabina del avión o del autobús, o para que un perro pueda entrar a una estancia o establecimiento.
Estos perros son compañeros con la función de ayudar a las personas brindándoles compañía, consuelo y, como su nombre lo dice, apoyo emocional. A diferencia de los perros de servicio, adiestrados para llevar a cabo tareas específicas, los perros de apoyo emocional requieren solo de su presencia para realizar su labor. Ese perrito al que tanto apreciamos no precisa tener un certificado de adiestramiento para acercarse y levantar el ánimo cuando se está triste, de la misma forma que no todas las personas necesitan un título en psicología para escuchar los problemas de un amigo cercano.
Un valiente joven quiso compartirnos su experiencia: “en ese momento solo estaba pensando una cosa: me rindo. No pensaba en nadie ni en nada, solo pasaba por mi mente que ya no quería seguir… después me interrumpió escuchar los ladridos de mi perro desde allá afuera. Entonces si comencé a pensar en alguien que me importaba. El peludo que me acompaña cuando lloro y me mira sentado con cara de tonto cuando le platico mis problemas”.
¿Sabías que alrededor del mundo, muchas personas desisten de su idea de abandonar este mundo gracias a su perro? Pues un perro es suficiente para darnos un propósito en la vida, para despertarnos con ánimo cada mañana, para sentir ese apoyo incondicional que tanto buscamos.
Muchas personas viven atormentadas por sus problemas, sin embargo, cuando no encuentren a una persona que les quiera dar la mano, siempre habrá un peludo dispuesto a brindarles una pata. No importa la edad, la condición socioeconómica, si estamos sanos o no, siempre habrá un perro dispuesto a brindar soporte emocional, siempre habrá una pata amiga para quien la necesite.

Categoría: Columnas

Footer

Síguenos en:

TOP · Derechos Reservados 2020 ©

Nuestros Sitios

  • Hora Cero Web
  • Hora Cero Tamaulipas
  • Hora Cero Encuestas
  • Hora Cero Nuevo León
  • Revista Top
  • Revista Doctors

Sitios de Interés

  • El Universal
  • Diario Milenio
  • El Mañana de Nuevo Laredo
  • El Diario de Laredo
  • El Norte
  • La Jornada
  • En Río Bravo
  • La Prensa

  • Sociales
  • Eventos
  • Entrevista
  • Reportaje
  • Espectáculos
  • Columnas
  • Edición Impresa