Los días soleados permiten a los niños vestir ropa fresca y cómoda, comer paletas frías, morderle a una dulce rebanada de sandía sin remordimiento, descalzos brincar sobre el piso mojado, sentarse en el jardín y disfrutar de las flores que con sus colores dan alegría a los paisajes.
Darle la bienvenida a la primavera permite tener días llenos de luz para convivir con la naturaleza, jugar al aire libre y disfrutar horas plenas de diversión.
Los pequeños bajo el sol reciben grandes cantidades de vitamina D básica para el fortalecimiento de los huesos, sin embargo, hay que tener cuidado de no exponerlos demasiado, y protegerlos con bloqueador. Las horas menos indicadas para tomarlo es entre 12 y 4 de la tarde, así que después hay que aprovecharlo al máximo, pero con precaución.
¡A disfrutar!
Si bien el astro rey es una fuente de luz y salud, también se debe procurar no exponerse a los rayos en exceso, evitarlo entre el mediodía y las 16:00 horas, usar bloqueador en la piel e hidratarse continuamente.