Por Alejandra Arellano.
Automóviles de lujo de principios de 1900 hasta una patrulla que se convierte en robot forman parte de la exhibición internacional de carros en McAllen. Camionetas y carros antiguos hechos de lámina con tablero y asientos de piel. Plymouth, Triumph, Mustang, Lamborghini, Cadillac y hasta los inigualables “vochos” de la VW se alinearon con el famoso “coche fantástico”, el inteligente e indestructible Pontiac Firebird Trans Am del 82, llamado Kitt, además del Batimóvil y Rayo McQueen de la película Cars.
En contraparte con los más antigüos, una patrulla de la policía se convirtió en robot. El Megamorphcar de Clark dio un espectáculo que sorprendió a los asistentes, haciendo alusión al filme The Transformers.
Como joyas de colección se exhibieron alrededor de 300 vehículos de principios y hasta mediados de siglo pasado en el McAllen International CarFest. Unas verdaderas obras de arte a las que se le ha cuidado el más mínimo detalle para mantener su originalidad y belleza aún con el paso del tiempo.
En dos y hasta cuatro llantas, pero siempre sobre ruedas, formaron parte de esta galería bicicletas, triciclos, motocicletas y hasta carriolas con adaptaciones, como algunas bykes que se convirtieron en lowrider.
Algunos con adaptaciones hechas, pero siempre tratando de conservar la calidad de cada una de sus piezas.
En su décima edición, el CarFest como cada año recibe cientos de familias del Valle de Texas y Reynosa.