Alcalde de Altamira sostiene que con el apoyo de su esposa en dicha instancia y el respaldo que siempre le ha brindado, trabajarán para toda la población del municipio.
El presidente municipal de Altamira, Armando Martínez Manríquez, agradeció el apoyo de su esposa Rossy Luque de Martínez, durante más de tres décadas y se dijo feliz de que ella pueda ahora acompañarlo desde el sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), trabajando desde el gobierno para los ciudadanos de esta localidad porteña del sur de Tamaulipas.
“Mi esposa nunca me ha soltado para nada, ha sido mi fortaleza durante muchos años de mi vida; me tarde 32 años para ser presidente municipal y mi esposa siempre ha estado ahí y tomados de la mano seguimos”, refirió.
El edil comentó que ambos están dando su mayor esfuerzo para velar por el bienestar de los habitantes de esta ciudad.
Asímismo manifestó su compromiso que hizo desde antes de ser alcalde, de estar al servicio de los ciudadanos en cuando a los servicios se refiere, pero también en el lado humano.
“Me siento muy contento porque desde la campaña dijimos que íbamos a fortalecer la unidad familiar y estamos trabajando para eso. Durante las pláticas prematrimoniales que desarrolló Bienestar Social, fui testigo que sin duda nuestro gobierno de Altamira y el DIF Municipal van a trabajar, para juntos transformar el tejido social de nuestra querida ciudad”, afirmó Martínez Manríquez.
El munícipe se encuentra muy entusiasmado realizando su trabajo, junto con sus colaboradores.
Desde muy temprana hora ofrece una rueda de prensa para informar las acciones que se encuentra realizando y durante el día visita las diferentes colonias y supervisa que se trabaje en favor de la comunidad, junto con el apoyo del Sistema DIF.