¿Cómo adaptar su comportamiento en la sociedad moderna?
POR Ing. Enrique Carlos Cantú Hernández
CEO del K9-Rey, centro de adiestramiento canino
Este tema no es nuevo en el mundo de la canofilia, ya que por muchos años los perros han formado parte esencial en las actividades humanas.
Por dar un ejemplo, en el pasado los perros molosos o de gran tamaño fueron por muchos años utilizados para la protección de las personas, los sabuesos empleados para la búsqueda y los Husky jalando trineos en Siberia, entre otras más actividades de más razas.
En la actualidad se desarrollan perros de trabajo para búsqueda y rescate, detección de sustancias, asistencia emocional, guardia y protección, actividades recreativas y apoyo en la salud con la detección de células cancerígenas y como lazarillos.
Actualmente con la evolución de la sociedad, que a diario genera nuevos estilos de vida en lugares y condiciones cada vez más reducidas, aparecen nuevos retos para el ser humano, así como para las mascotas. Sobre todo para los animales de mayor tamaño, ya que las zonas urbanas no cuentan con grandes extensiones de terreno, ocasionando la aparición de nuevas enfermedades que se originan por la falta de ejercicio. Para poder lidiar con esto, las personas han optado por salir a caminar con sus mascotas, pero por falta de educación y conocimiento, las mascotas terminan ‘paseando a los dueños’.
Puede parecer gracioso, pero es un problema, ya que es la falta de control y educación de las mascotas la que ocasiona graves accidentes.
Lo importante en este punto es que por más que intentemos tener en nuestros hogares o áreas de trabajo a un compañero de vida, mascota, perro de trabajo o de servicio, será imprescindible encontrar actividades en las cuales nuestro compañero pueda liberar por completo su potencial y se sienta a gusto para poder desarrollar sus instintos y habilidades naturales.
Pero: ¿cómo puedo lograr que mi perro alcance su máximo potencial sin afectar a las personas y otros animalitos que habitan en el mismo lugar que yo?
A lo largo de los años y gracias a la dedicación de muchos apasionados a la canofilia y a la crianza, se han desarrollado métodos, técnicas y herramientas que facilitan alcanzar la meta de lograr la modificación de la conducta de los caninos.
El adiestramiento es un proceso mediante el cual los tutores pueden enseñar a los caninos diferentes habilidades y comportamientos.
Algunas de las órdenes más populares son: sentarse, quedarse quieto, venir cuando se le llama, caminar juntos, entre otras que son específicas para un propósito en particular. Para lograrlo existen varios métodos para modificar el comportamiento canino, cada uno con ventajas y desventajas. Algunos de los métodos más utilizados son:
- Adiestramiento positivo: este método se basa en el refuerzo de las conductas aceptables mediante el uso de recompensas, como golosinas o elogios. Este método se considera muy efectivo ya que fomenta un ambiente positivo entre el tutor y el canino.
- Adiestramiento tradicional: se basa en el uso de correcciones para desalentar los comportamientos no deseados. Este método es el más complejo, ya que cuando los tutores carecen de un carácter firme al momento de marcar los límites para el comportamiento de la mascota, ésta genera un ambiente negativo entre el tutor y la o las mascotas, ya que de no hacerse de una manera controlada, la mascota puede sentir miedo o resentimiento hacia las personas.
- Adiestramiento con clicker: se basa en el uso de un artilugio del mismo nombre, clicker, el cual es un dispositivo que emite un sonido al presionarlo, y se acciona con el propósito de marcar el comportamiento deseado, seguido de una recompensa, normalmente golosina o una recompensa de alto valor para la mascota. Este método es muy efectivo para las actividades específicas o trucos de exhibición.
En general, el adiestramiento canino es un proceso continuo que requiere paciencia, consistencia y un enfoque positivo. Es importante recordar que cada perro es único y puede responder de maneras diferentes a diferentes métodos y tutores. Siempre es mejor asesorarse con un profesional si se tienen dudas o problemas con el comportamiento de su mascota.
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