Para bajar el peso que se ganó el fin de año, si es que no se trata solo de inflamación del estómago, mala digestión o retención de líquidos.
Si al iniciar el mes de enero notas que tienes unos kilos de más y te sientes inflamada, como consecuencia de las fiesta de diciembre, es normal, no te preocupes.
Es importante aclarar que (en la mayoría de los casos) no se deben a un aumento de peso ni son puramente grasa, aunque la báscula marque un número más alto o bien porque la ropa te queda más ajustada. Lo más probable es que sean consecuencia de alguna inflamación, falta de buena digestión o líquidos retenidos. Así que no te estreses.
Es “probable” porque cada cuerpo y metabolismo son diferentes. Síntomas como la retención de líquidos y la inflamación, entre otros padecimientos, se pueden presentar en las personas que se ‘salieron de la línea’ solamente algunos días. En cambio, para los que disfrutaron de todo el mes de diciembre, fuera de su alimentación normal estos síntomas estarán presentes acompañados de un aumento de peso.
Definitivamente, cual sea la opción, las siguientes recomendaciones te ayudarán a regresar y retomar tu rutina, para bajar aquellos kilos.
¡Adiós a los kilos de más!
Regresar al estilo de vida saludable. Comer más verduras, proteínas magras (huevo, pollo, pescado, salmón, chuleta de cerdo, sirloin, etc), limitar los carbohidratos (pero no eliminarlos por completo) y procurar que sean integrales (arroz integral, pasta integral…). Evita azúcares, postres, alimentos fritos, alimentos procesados, refrescos… Preferiblemente, cambia las bebidas azucaradas por agua natural, limonada o jamaica, preparadas con algún endulzante artificial (Stevia, Splenda).
Siempre desayuna, come y cena. Si hay hambre entre comidas se puede consumir alguna colación: palomitas naturales, verduras con chile en polvo, hummus, nueces, gelatina… Por ningún motivo te saltes algún tiempo de comida con el fin de compensar todo lo que comiste en los días anteriores, es lo peor que puedes hacer.
Paso número dos. Retoma la actividad física, si no hacías ejercicio, es tiempo de empezar. Importante iniciar con alguna actividad leve-moderada, no quieras llegar y cargar mil pesas en el gym porque todo cambio positivo lleva su tiempo y progreso. Trata de hacer ejercicios más leves como caminatas, trotar, jugar tenis o algún deporte que disfrutes. Realiza alguna actividad que te guste para que no lo sientas como una obligación, sino que como un momento de sosiego. Después de una o dos semanas aumenta un poco la intensidad ya sea HIIT, pesas, ligas, ejercicios que trabajen más el músculo y ayuden a gastar más energía.
En caso de que hayas interrumpido tu rutina de ejercicios por las fiestas, retómalos poco a poco.
El ejercicio es lo que ayuda a crear el famoso “déficit calórico” que es lo que hace que se pierda peso.
Tercer y último paso. No sigas dietas extremas que te prometen bajar diez kilos en una semana o los famosos “retos” para lograr una figura envidiable.
Olvídate de las dietas milagro, como la de la manzana, los jugos detox, sin carbohidratos.
La recomendación es regresar a tu rutina, comer saludable, tomar suficiente agua y hacer ejercicio.
Sin embargo, hacer una cita con alguna nutrióloga te ayudará de manera personalizada a alcanzar tus objetivos.
El cambio no será de la noche a la mañana, pero si se avanza con paso firme permanecerá y se convertirá en un estilo de vida saludable.
Paciencia, esfuerzo y disciplina son tus tres mejores amigos que te ayudarán a lograr tu objetivo.
Los tres pasos para quemar los kilos
1. Come más verduras, sin evitar los carbohidratos, y mejor la Stevia que el azúcar refinada. No saltarse ninguna comida.
2. Retoma el ejercicio o inicia algún deporte. ¡Nunca es tarde. En cualquiera de los casos empieza de moderado a intenso.
3. Olvídate de las dietas milagros y los retos. Todo lleva su tiempo y con constancia y disciplina el peso ideal se conseguirá.
Por Dibanhi López
Lic. en Nutrición y Bienestar Integral
Instagram: @nutre_mx