Un reconocimiento al fundador y director del Colegio Tamaulipas, el primero en Reynosa con clases impartidas por maestros normalistas.
Entregado a la noble tarea de educar, y con el lema: “La patria se forja en la escuela”, el profesor Aníbal Pérez González es recordado durante los festejos del 75 aniversario del Colegio Tamaulipas, como su fundador y director.
La docencia se volvió su vocación y lo que más disfrutó en su vida.
De maestro rural en Oaxaca y Sonora pasó a ser director de Educación Federal en el Estado de Tamaulipas por parte del gobernador Marte R. Gómez, y en 1944 el general Tiburcio Garza Zamora le solicitó crear una escuela, la primera en Reynosa con clases impartidas por maestros normalistas, a la que llamó Colegio Tamaulipas.
Aún cuando la situación de su familia era precaria, vivían en un rancho y tuvieron que mudarse a Tampico al quedar desposeídos de su ganado en la época de la Revolución Mexicana, don Aníbal no claudicó en su afán de continuar preparándose y llegó hasta la Escuela Normal Superior donde se formó en la docencia, donde tuvo como maestros a los ilustres Lauro Aguirre, Alfredo Uruchurtu, Leopoldo Quiel y Joaquín Gallo.
A 25 años de su fallecimiento, el Colegio Tamaulipas le rinde un merecido homenaje a quien fue un pilar de la educación en Tamaulipas.
Su legado fue heredado por sus hijos, los que asumieron la responsabilidad de continuar forjando personas de bien por un mejor Reynosa.
INFANCIA DIFÍCIL
El 1 de julio de 1907 Aníbal Pérez González nació en el rancho “El Caracol”, donde radicaban sus padres, Cruz Pérez y Carlota González de Pérez. Después se mudaron al rancho “El Verde chico”, y más tarde a la localidad de Santa María, lugares ubicados en el municipio de Soto la Marina, estado de Tamaulipas.
En aquellos años empezaba a gestarse la Revolución Mexicana. Fue justamente ésto por lo que sus padres perdieron el ganado vacuno y los caballos que tenían. Nuevamente tomaron sus maletas y viajaron a la ciudad de Tampico para establecerse aquí.
Al llegar al puerto se desató una epidemia de influenza que causó estragos en casi toda la población, pero no en ellos por la oportuna intervención de dos médicos japoneses.
En 1921, a pesar de que ingresó a la Primaria “Juan B. de la Garza” a la edad de 14 años, ya sabía leer y escribir, gracias al gusto que tenía por la lectura.
Al mismo tiempo que estudiaba, trabajaba.
Continuó el quinto y sexto grado en la “Gabino Barrera”; leer
seguía siendo su pasatiempo favorito.
Eran pocos los libros que tenía a su alcance así que le surgió la idea de crear una biblioteca. Cuando tuvo la oportunidad de entrevistarse con el presidente municipal de la ciudad se lo comentó, y fue: “México a través de los siglos”, la primera obra que le solicitó.
Cada cierto tiempo así lo hizo hasta que culminó la primaria, en 1925. En esta fecha ya había logrado crear una magnifica biblioteca en la escuela.
DE MAESTRO RURAL A DIRECTOR DE EDUCACION FEDERAL
Afortunadamente, se encontró con su maestro don Agapito Mata Garza, quien le ofreció el puesto de maestro rural en Pueblo Viejo, Veracruz.
Al mismo tiempo se convirtió en orador por afición, lo que le permitió dar un discurso en la campaña de Alvaro Obregón en contra del oponente del general. Este acto lo llevó a la cárcel pero salvó su vida, por la amistad que tenía con el profesor Eutilio de Fuentes, en ese entonces regidor del Ayuntamiento, así como de Manuel Cruz, su primo, quien ocupaba el cargo de jefe de Barandilla.
Su interés de seguir preparándose lo hizo acreedor a una beca que le dio la oportunidad de ingresar a la Escuela Normal Superior en Ciudad Victoria.
En el año de 1929, cuando cursaba el segundo año, se celebró el primer Congreso Nacional de Estudiantes Normalistas; Aníbal y su compañero Espiridión Mérida Centeno fueron dos de los alumnos elegidos para asistir. Emocionados se entrevistaron con el gobernador del Estado, Francisco Castellanos, quien les encomendó dar un discurso.
Con una beca en efectivo, Aníbal continuó sus estudios. Fue en 1934 que presentando examen a título de suficiencia, obtiene el título de profesor de educación primaria y superior.
Al llegar a Reynosa, en 1931 fue director de la escuela Miguel Hidalgo. Con el tiempo, fue reconocida como una de las mejores.
Aquí conoció a Delia Vargas, una mujer muy guapa a la que le pidió fuera su novia. Al tiempo decidieron casarse el 27 de septiembre de 1932. Fue por el civil, ya que en aquel tiempo por la Guerra Cristera no había iglesias.
La pareja tuvo seis hijos: Delia Elizabeth, María de Jesús, Aníbal, Macarena, Aída Socorro y Héctor.
COLEGIO TAMAULIPAS
Después de haber trabajado como maestro rural en Sonora y Oaxaca asumió el cargo de director de Educación en el Estado de Tamaulipas, cuando Marte R. Gómez fungía como gobernador. Fue él mismo quien lo nombró en 1943 como visitador general de la Secretaría de Agricultura y Fomento, por el lapso de un año.
Durante este tiempo el general Tiburcio Garza Zamora, Manuel Tárrega Guevara y Benigno Benavides le solicitaron fundar una escuela en Reynosa, en la que maestros normalistas impartieran las clases.
Junto a su esposa, y con el legado: “Si hay algo que nunca te podrán quitar es la educación”, ambos emprendieron el proyecto. Inicialmente estaba considerada para solo 18 alumnos, pero el interés por parte de otros padres de familia interesados en la educación de sus hijos a cargo de maestros con carrera, abrieron la escuela con 187 niños en el nivel kínder y primaria.
Así nació el Colegio Tamaulipas, en una pequeña casa, propiedad de Don Juan Ochoa, ubicada en la
calle Allende. Debido al auge que tuvo cambiaron de domicilio a la calle Pedro J. Méndez. Continuó el crecimiento y después de 1979 el colegio estrenó instalaciones en la colonia Rodríguez.
Así se convirtió en la primera escuela en Reynosa con clases impartidas por maestros normalistas.
El nivel educativo ha sido equiparable a los mejores en México, por lo que el profesor Aníbal decidió llamarlo Colegio Tamaulipas, haciendo honor al Estado.
En 1945 el profesor forma parte de un esfuerzo ciudadano que buscaba aumentar los espacios para que jóvenes de Reynosa pudieran estudiar; es secretario del patronato pro fundación de Escuelas técnicas superiores en Tamaulipas, presidido por don Manuel Garza Zamora, en ese mismo año.
MENSAJE A SUS ALUMNOS
El profesor Aníbal Pérez González fue director del Colegio Tamaulipas hasta el día de su muerte en abril de 1994, meses antes que se cumplieran 50 años de fundación.
Al tener la vocación y ser maestro de carrera, todos los lunes en la ceremonia cívica daba un mensaje a sus alumnos, a quienes les recordaba la importancia de los valores cívicos y la educación.