En la infancia los padres se convierten en los superhéroes de los hijos. De pequeños quieren ser como papá, cuando se les pregunta a qué persona se quieren parecer cuando sean grandes.
En la etapa adulta, ya sea que se hayan convertido en profesionistas o seguido sus pensamientos de ser bombero o policía, el título de papá se lo cuelgan con mucho orgullo.
En el Día del Padre, un homenaje a todos esos hombres que a pesar del tiempo siguen siendo para sus hijos unos verdaderos héroes sin capa.
Recordar en esta fecha tan especial que papá también pasó por la infancia y la adolescencia, y aunque los años le han sacado algunas canas, todavía siguen teniendo corazón de niños.
SUPERHÉROE
No es alto, ni tiene músculos y, mucho menos cara de ángel, pero para sus hijos papá es un superhéroe.
Más allá de las características físicas de estos súper hombres, que no tienen nada qué ver con esa admiración que sienten los niños hacia sus progenitores, es el rol de “protección” que juegan en la familia lo que despierta su interés para ser como ellos, aunque cuando sean grandes no siempre le sigan los pasos.
Además de la protección y cuidado que les profesan, los pequeños consideran a sus padres las personas que resuelven los problemas en la casa; frente a situaciones dañinas los mantienen alejados dibujándoles un mundo de amor, además de realizar cosas que los niños no pueden hacer.
CORRESPONSABILIDAD
Durante muchos años se ha tenido presente la figura del padre dedicada en cuerpo y alma al trabajo, así como la madre dedicada a la familia.
Sin embargo, con el tiempo ha surgido una corresponsabilidad familiar en la que mamá y papá trabajan fuera de casa y comparten las actividades de los niños, quizás aún no de la forma que quisieran las mujeres, pero el tiempo y la lucha de ellas se ha encargado de que haya un equilibrio de responsabilidades entre ambos padres.
La figura paterna en los primeros años del siglo XXI ha experimentado cambios al asumir roles familiares más dedicados a sus hijos, a disfrutar de la familia y darse cuenta de la importancia de la presencia paterna y materna para el desarrollo de sus progenitores y la influencia en ellos.
Incluso encuestas realizadas en algunas universidades revelan que los jóvenes apuestan por la corresponsabilidad.
PRETENSIONES
Muchos de los niños pretenden seguir los pasos de papá, de no ser así, quieren ser de grandes: médicos, maestros, ingenieros, arquitectos, veterinarios, abogados y policías.
Actualmente, parecen estar influenciados por las expectativas culturales y sociales de su entorno. Por ejemplo, la importancia de la educación y la familia en la cultura mexicana pueden estar influyendo en la elección de carreras como la medicina y la enseñanza. Asimismo, la popularidad del fútbol en México puede estar impulsando la elección de la carrera de futbolista.