POR ALEJANDRA ARELLANO
Si los layers y las combinaciones de oro, rosado, plateado y negro es en joyería lo que marca la tendencia, en febrero el amor se demuestra con corazones en anillos, pulseras y collares.
La amatista, una variedad de cuarzo o gemas como la zirconia brillan en cadenas de eslabón o anillos ajustables. La primera un cristal curativo con efectos tranquilizantes, mientras que la segunda tan apreciada como el diamante.
La chapa de oro, la plata, el acero inoxidable, y las diferentes texturas crean piezas únicas, como es el corazón relicario, para vivir por amor y grabar momentos dulces.
MEJOR VARIOS
Los layers. Una, dos, tres o cuatro cadenas de eslabones gruesos y delgados; diferentes tamaños y formas, con dijes ya sea de corazón o figuras variadas atraen la atención y se muestran como las preferidas para lucir como parte del guardarropa
Cristal curativo
> Pulsera con cuarzo amatista en chapa dorada, guiada por dos cadenas de eslabón. Anillos ajustables del Sagrado Corazón en chapa de oro.
Sagrado corazón
> Anillos ajustables. Baño de oro y estrellas con zirconias. Anillo de Sagrado Corazón rojo en chapa de oro.
Vive por amor
> Collar, cadena de eslabones en acero inoxidable en forma de corazón relicario para siempre estar contigo.
Ajustables
> Anillos con apertura de cadena, joyería de acero inoxidable, textura de metal dorado. Anillo minimalista ajustable de plata .925 en forma de nudo. Anillo circular de zirconia.