La jícama es considerada una fruta aunque en realidad sea una planta leguminosa, es muy popular en México, su país de origen y la verdad es que además de ser muy rica acompañada con limón y chile en polvo, podemos disfrutar de ella sin temor alguno, esto debido a que contiene muchas propiedades que ayudan a nuestro organismo a mantenerse nutrido, lo que lo hace perfecto para cualquier dieta.
Como la mayoría de las frutas y las verduras, la jícama proporciona muy poca proteína ya que contiene el 0.7%, el 0.01% de grasa y el 4.9% de fibra. Contiene además pectinas y amilopectinas que hacen que nuestra digestión sea mejor gracias a que nutren a la microflora intestinal y estimulan al sistema inmunológico.
Su contenido nutrimento es así: 100 gramos de Jícama proporciona varios minerales importantes como el calcio (20 miligramos), fósforo (18 miligramos), hierro (0.6 miligramos), potasio (150 miligramos), magnesio (12 miligramos), manganeso (0.06 miligramos), sodio (4 miligramos), zinc (160 microgramos (ug) y cobre 0.06 ug.
No solo eso, sino que su contenido es 90 por ciento agua y aporta antioxidantes a base de vitaminas como complejo B, acido fólico, entre otras que ayudan a regular los niveles de glucosa e la sangre, ideal para el consumo de personas diabéticas.
Entre los beneficios que podemos encontrar se encuentran: es refrescante por su gran contenido de agua, tiene propiedades diuréticas, previene infecciones gastrointestinales, reduce el colesterol y triglicéridos, ayuda con la asimilación del calcio y muy importante, no engorda.
Así que puedes incluir este alimento en tu menú del día y disfrutar de todos estos beneficios para tu salud.